¿Puede una mujer latina de una pequeña aldea, destacar en el mundo de la ciencia?

TRIVIA
Científica comprometida con la sociedad, se lanzó para Gobernadora de su Estado por un partido minoritario. Perdió las elecciones.

María Esther Orozco Orozco, licenciada en química por la Universidad de Chihuahua y doctora en ciencias por el Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional en México, nació en San Isidro, un pequeño poblado de 1,500 habitantes al pie de la Sierra Madre en el estado mexicano de Chihuahua.

En 1981, en el Departamento de Genética y Biología Molecular del Cinvestav, inició la formación de un grupo de investigación dedicado a estudiar los factores de virulencia de la amiba.

LA FAMILIA
Se ha podido dedicar de lleno a la investigación gracias a que su necesidad de amor y sentimiento ha sido satisfecha plenamente por Tomás Sánchez, con quien está casada desde hace 33 años, y por sus hijos Sofía Alejandra y Julio César.

Después de 16 años de investigación el Instituto Pasteur en Francia y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) le otorgaron la Medalla Pasteur por sus descubrimientos sobre la estructura molecular y genética de la amiba.

La amibiasis es la segunda causa de muerte por parasitosis en el mundo, después de la malaria. Hay 500 millones de personas infectadas en todo el orbe y se reportan 100,000 casos de muerte al año.

Con sus descubrimientos, la Dra. Orozco ha generado una oportunidad importante, real y basada en datos científicos, de obtener una vacuna contra este padecimiento que es una verdadera amenaza de salud pública en países pobres.

Dueña de un gran sentimiento de solidaridad, comenta: “Cuando nos otorgaron la Medalla Pasteur fue una fiesta para mí, para mi familia, para mi grupo de trabajo, para los chihuahuenses, para los mexicanos, para todos los latinoamericanos.”

SU OTRO YO
María Esther Orozco es maestra genéticamente hablando. Su abuela fue maestra, sus tíos fueron maestros, sus hermanos son maestros y ella misma fue maestra de primaria, secundaria y preparatoria mientras estudiaba la universidad.

“Fue un reconocimiento al talento de nuestros países... así nos sentimos orgullosos cuando gana la selección de futbol de Brasil... o cuando leemos los trabajos de García Márquez... o cuando se investigan las amibas...”

“Dos cosas se conjugan para el éxito: el espíritu latino y el ser mujer. Cuando como latina o como mujer estás en un foro internacional, tienes la gran responsabilidad de demostrar que tienes todo lo necesario para ser tomada en cuenta.”

Además de la Medalla Pasteur, la Dra. Orozco ha recibido el Premio Nacional Miguel Otero, el Premio Rosenkranz, la Beca Guggenheim, la Beca Fogerty y es Investigadora Internacional del Howard Hughes Medical Institute de los Estados Unidos.

En la base de la pirámide del buen vivir está el bien saber.

Paralelamente a la investigación científica, la Dra. Orozco ha publicado más de 90 artículos científicos, ha dirigido 14 tesis de doctorado, 16 de maestría y 13 de licenciatura y es profesora en el Instituto Politécnico Nacional, en el Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav-IPN) y en el Centro de Investigación en Ciencia Aplicada y Tecnología Avanzada (Cicata-IPN).

Esther Orozco, ejemplo de lo máximo del espíritu latino.