¿Puede
una cubana ser la mejor poetisa española del romanticismo?
TRIVIA
Para sus allegados, Gertrudis Gómez de Avellaneda era
conocida como Tula. |
El
romanticismo es un movimiento literario, cuya principal
característica es el subjetivismo arropado en la exaltación
de la personalidad individual y la oposición a las normas
clásicas. Inició a fines del Siglo XVIII y duró
gran parte del Siglo XIX.
Cuba
en el romántico Siglo XIX todavía era
una colonia española.
Así,
Gertrudis Gómez de Avellaneda, nacida el 23 de marzo de 1814
en Puerto Príncipe, hoy Camagüey, en Cuba, se convirtió
por derecho propio en la máxima exponente literaria del romanticismo,
tanto en España, país donde radicó casi toda
su vida, como en Cuba donde inició su educación y
ejerció una notable influencia.
VERSO
¡Perla del mar! ¡Estrella de Occidente! / ¡Hermosa
Cuba! tu brillante cielo / la noche cubre con su opaco velo,
/ como cubre el dolor mi triste frente.
Del soneto Al Partir, escrito en el barco que
la llevaba a Europa. |
Gómez
de Avellaneda llegó a Europa acompañando a su familia
a los 22 años de edad y ya desde entonces dejó entrever
su temperamento apasionado y trágico, muy acorde con el romanticismo,
que recorría el viejo continente.
Amó
apasionadamente y, a pesar de su belleza física, casi nunca
fue correspondida, lo cual quedó marcado de forma indeleble
en su alma y en sus versos más ardientes.
En
1839 empezó a publicar sus poemas en el periódico
La Aureola en Cádiz con el seudónimo La
Peregrina. Posteriormente se trasladó a Madrid, donde
después de leer sus poemas en el Liceo Artístico,
conquista el mundo literario de la gran capital y se hace amiga
de los autores románticos de la época, Manuel José
Quintana, José de Espronceda y José Zorrilla, con
quienes alterna en tertulias y veladas literarias.
En
toda su poesía, el amor es tema fundamental: apasionado,
tierno, nostálgico. Expresión lírica que denota
la influencia de su círculo de amigos combinada con su propia
visión romántica e impregnada con el pesimismo de
su gran sufrimiento personal.
No
habiendo tragedias que leer, yo comencé a crearlas.
Gertrudis comentando la prohibición de su madre de
no leer obras de teatro.
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En
su creación teatral, los personajes surgen de un serio análisis
psicológico y se enmarcan en una cuidadosa estructura dramática.
Destacan así Junio Alfonso (1844) inspirada en
la vida del rey Alfonso X, Saúl (1849) drama
bíblico de notable éxito y Baltasar (1858)
también dramatización de la Biblia.
En
su obra, Gertrudis, no sólo se apasionó por el amor,
sino que también defendió ideas muy osadas para el
ambiente de mediados del Siglo XIX. Su novela Sab (1841)
es la primera en español donde se critica abiertamente la
esclavitud.
La
Avellaneda, gran figura de las letras cubanas y españolas,
es considerada también en España, Francia y Cuba como
la precursora del feminismo moderno, tanto por su forma de vivir
como por las ideas plasmadas en su obra, principalmente a través
de sus personajes femeninos.
SU
DRAMA PERSONAL
Huérfana de padre a los 8 años de edad. Dos intensos
amores no correspondidos. I. de Cepeda y G. García Tassara.
Madre soltera en 1845. Muere su hija a los 7 meses de nacida.
Viuda de Pedro Sabater en sólo tres meses. Viuda de Diego
Verdugo a escasos 5 años de casados. |
No
defendió la igualdad con el hombre, ni el derecho al sufragio,
sino que denunció la opresión de la mujer en un mundo
donde belleza y maternidad eran los únicos atributos que
se le concedían.
Baste
este fragmento para ilustrar sus ideas: ''¡Oh, las mujeres!
Pobres y ciegas víctimas. Como los esclavos, ellas arrastran
pacientemente su cadena y bajan la cabeza bajo el yugo de las leyes
humanas.
El
1º de febrero de 1873, la diabetes vence por fin al vibrante espíritu
lírico, dramático y profundamente feminista de Gertrudis.
Gertrudis
Gómez de Avellaneda, ejemplo de lo máximo del espíritu
latino.
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